La encuadernación es el acto de “juntar, unir, coser varios pliegos o cuadernos y ponerles cubiertas” (definición de la RAE). Aunque el propósito sea el mismo, existen diversos tipos de encuadernación. La elección entre un tipo u otro va a depender, fundamentalmente de: la cantidad de hojas y gramaje que se quieran unir, del presupuesto que se tenga, del uso que se le vaya a dar al documento y de la estética que se quiera conseguir.
Tipos de encuadernación más usuales:
A continuación enumeramos las distintas tipologías de encuadernación disponibles a nivel comercial, tanto para libros como para cuadernos, libretas u otros productos que requieran unir varias hojas. Cuando hablamos de nivel comercial nos referimos a aquellas que pueden ser mecanizadas, dejando para otra ocasión las tipología de la encuadernación artesanal. Las presentamos ordenadas desde las más sencillas hasta las más elaboradas o costosas.
· Encuadernación grapada:
La opción más sencilla es la encuadernación grapada en caballete. La grapa queda en el centro del pliego y puede unir diversa cantidad de páginas, según el tamaño de la grapa.
La más normal es la grapa plana, pero también se puede usar la grapa omega, la cual permite que se pueda archivar el documento gracias a su forma.
Esta sencilla encuadernación es utilizada para revistas, periódicos, fanzines, cómics, manuales y folletos publicitarios.
· Encuadernación encolada:
Esta opción está destinada fundamentalmente para hacer blocks de notas cuyas hojas queremos que se mantengan unidas mientras se escribe, pero que se puedan despegar de manera fácil; por ejemplo para listas de la compra. Consiste en encolar el lomo de las hojas bien emparejadas. Una vez que la cola se seca, estas quedan bien unidas entre sí. En esta encuadernación, o bien no lleva tapa, o se pega la última hoja a la tapa, puesto que para poder separar las hojas, estas deben no estar pegadas al lomo.
· Encuadernación cosida:
En el caso de que el producto a encuadernar tenga pocas páginas y tapa blanda, se puede optar por el cosido de sus páginas. Este se realiza por el lomo y queda a la vista.
Es una muy buena opción para cuadernos y fanzines a los que se le quiere dar un toque distinto.
· Encuadernación de copistería:
En esta categoría he querido englobar tres encuadernaciones diferentes pero que tienen un procedimiento similar. En este caso, se le realizan a las hojas unos troquelados en un lateral, y se unen entre sí utilizando un elemento plástico o de metal:
Encuadernación de canutillo.
En esta encuadernación se utiliza una pieza plástica. Su principal ventaja es que se puede reutilizar. En su contra, no permite el plegado completo del taco de hojas.
Esta encuadernación es muy utilizada en colegios para organizar material didáctico, así como en oficinas para encuadernar documentos administrativos.
Encuadernación de espiral.
El elemento que une las hojas es una espiral de plástico o metálica. A diferencia del canutillo, la espiral permite girar completamente las hojas.
Ampliamente utilizada en los entornos estudiantiles para apuntes y trabajos; así como para manuales, calendarios y agendas.
Encuadernación de wire-o.
Se utiliza para unir las hojas una pieza metálica de doble espiral. Es muy rápido de colocar (teniendo la maquinaria necesaria) y es muy práctico y funcional.
Permite la encuadernación tanto con tapas blandas como con tapas duras.
Esta opción es muy utilizada para libretas, catálogos, recetarios, manuales y temarios.
· Encuadernación Channel:
En esta encuadernación, las hojas se unen por uno de sus costados mediante un perfil metálico. Posteriormente, se coloca una cubierta prefabricada, generalmente en tapa dura, la cual se puede personalizar.
Esta opción es muy frecuente en copisterías de entornos universitarios, donde realizan muchas impresiones de tesinas.
· Encuadernación de tapa blanda o rústica:
Es la forma de encuadernación más utilizada en la edición de libros, sobretodo de bolsillo, ya que su producción es muy sencilla y económica.
Rústica Fresada.
En esta encuadernación, se realiza unas pequeñas hendiduras en el lomo, y posteriormente las hojas son pegadas entre sí y a la tapa con adhesivo. Existen distintos tipos de colas que se utilizan en la encuadernación, aunque la más utilizada en la actualidad es la cola PUR. Esta cola en concreto permite una gran durabilidad, resistencia y flexibilidad al libro.
Esta opción es la más utilizada para libros, catálogos, revistas y folletos extensos.
Rústica Cosida.
En esta encuadernación, los cuadernillos que conforman el libro son cosidos entre sí; y posteriormente se pegan al lomo.
Esta encuadernación está recomendada para libros y catálogos a partir de 80 hojas y cuyo lomo mida más de 5mm de grosor, ya que proporciona mayor resistencia y durabilidad.
· Encuadernación de tapa dura o cartoné:
El cuerpo del documento se cose y se une a un cartón rígido de unos 2mm, forrado con tela, papel, cuero u otro material. Con esta encuadernación se consigue un producto de gran calidad y resistencia. La tapa dura admite todo tipo de decoración adicional, lo cual es aprovechado para la edición de libros de lujo.
Esta encuadernación es de las más costosas, pero permite realizar ediciones especiales y libros gruesos como enciclopedias y atlas.
Hasta aquí con esta presentación de los tipos de encuadernación más usuales a nivel comercial.
En un futuro post os mostraremos distintos tipos de encuadernación artesanal.
Recuerda que si tienes un proyecto editorial o necesitas imprimir algún trabajo especial, puedes contactarnos y pedirnos presupuesto sin compromiso.